La víspera de Año Nuevo es un momento muy poderoso en sí mismo. Toda la humanidad en un solo impulso trata de deshacerse de todas las desgracias y negatividades y entrar en el nuevo período con alegría y positividad.
A esto se le puede llamar meditación colectiva. Y si lo consideramos desde el punto de vista de la cosmoenergética, el poder de tal tsunami de energía es increíblemente grande. Nuestra tarea consiste únicamente en unirnos a este flujo mediante corrientes de nuestros estados positivos y formas de pensamiento. La Nochevieja es el momento más mágico. Levantando las copas bajo las campanadas, di: «¡Que haya paz, felicidad, amor en nuestro hogar y en nuestro mundo!». El 31 de diciembre, prepara té, preferiblemente té verde con miel. Coloca el vaso sobre un trozo de papel de color verde. Revuelve el té con un nuevo lápiz sencillo y piensa 1 — 2 minutos en las sumas de dinero y adquisiciones necesarias para ti en el próximo año. Lo principal es real para un año. No pidas lo que quieres para los próximos 10 años. Luego con el mismo lápiz escribe en una hoja verde: «El dinero del té será. Así será!». Después del Año Nuevo antes del amanecer te bebes el té, y la hoja debes meterla en el monedero. Preferiblemente uno nuevo. Y llevarlo todo el año sin sacarlo. Los fondos necesarios para las compras te serán atraídos. El primer día del nuevo año no hagas ningún trabajo pesado y sucio, de lo contrario pasarás penurias todo el año. Del 31 de diciembre al 19 de enero no prestes nada desde casa. De lo contrario, pasarás el año endeudado. No lo confundas con regalos y obsequios de corazón. Procura tener dinero en casa, planifica bien tus gastos festivos. En Nochevieja, intenta salir con tus invitados a celebrar el Año Nuevo, yendo y viniendo. Está muy bien hacer un baile redondo alrededor del árbol de Navidad, y cuanta más gente, conocidos y desconocidos,