Si tienes la oportunidad de viajar por el mundo, ¡eres un hombre afortunado! En este artículo quiero hablarte de los lugares más místicos y llenos de energía de nuestro planeta. Tales lugares, también llamados lugares de poder, de hecho, hay mucho más de lo que parece a primera vista. Muy a menudo, a partir de los tiempos más antiguos, los lugares que irradian energía fueron elegidos por los sacerdotes y chamanes para llevar a cabo prácticas rituales en sus lugares. Por ello, su historia suele ser muy pintoresca e interesante. Siempre recuerdo los libros de Carlos Castaneda, que describen con gran detalle para qué sirven estos lugares místicos de poder y cómo influyen en nuestro estado de ánimo.
Lugares místicos de poder: Stonehenge
Empezaremos en Inglaterra. Allí se alza una gigantesca (para su época) estructura de piedra de extraña forma. Al parecer, algunos de los bloques se enviaron desde la otra punta del país y eran de un maravilloso color azul celeste. A día de hoy, varias de las piedras tienen forma vertical, sobre la que descansa una losa horizontal. Las estructuras de este plano se asemejan a la letra «P». Los historiadores cuentan que las piedras se recogieron de toda Inglaterra y que tenían una gloria sagrada. No se sabe exactamente quién intervino en Stonehenge. Los arquitectos modernos sugieren que pudieron ser los romanos, mientras que los eruditos medievales atribuyeron la curiosidad a los suizos o alemanes. La opinión más extendida sobre esta construcción es que era la sede del poder de los druidas. En la intersección de las líneas de energía, los sacerdotes podían realizar fácilmente poderosas prácticas destinadas a atraer la lluvia o derrocar a un malhechor con la ayuda de las fuerzas de la naturaleza. De hecho, se puede adherir a cualquiera de las hipótesis sobre la historia del origen de este lugar. Pero el hecho de que Stonehenge es uno de los lugares energéticamente más poderosos del planeta Tierra es innegable.
Lugares místicos del mundo: Machu Picchu
Vamos a América. A Perú, para ser exactos. A una altitud de 2.450 metros sobre el nivel del mar. Allí se encuentra la verdadera maravilla del mundo: la antigua ciudad inca. Aunque esta misteriosa ciudad se construyó a mediados del siglo XV, ¡el lugar elegido para la edificación fue el adecuado! Los colonizadores españoles de su época no pudieron descubrir la ciudad. Los lugareños ocultaron su ubicación a los forasteros. El secreto de la ubicación de Machu Picchu no se reveló hasta 1911. «Ciudad en el cielo» -así se llama a menudo este lugar de poder- tiene una historia de origen muy místico. Las fuentes dicen que la ciudad celestial fue construida para el gobernante supremo — Pachacuteca. Tras su muerte, el lugar se convirtió en un centro de formación, donde se enseñaba a niños y nobles diversas ciencias: astronomía, ciencias militares, labores domésticas. Los científicos siguen discutiendo sobre qué ocurrió con los habitantes y qué hizo que todos los nobles se marcharan llevándose todo lo de valor (sospecho que fueron los españoles). En 2011 se inauguró aquí un museo completo con artefactos retirados anteriormente. La Ciudad Perdida figura en la lista de la UNESCO y es un tesoro cultural. Para apreciar los increíbles remolinos de energía que allí reinan, recomiendo visitar la «Montaña Vieja» (así se traduce el nombre de la ciudad) de abril a octubre. La temporada de lluvias, que dura de noviembre a marzo, puede estropear un poco la experiencia.
Lugares místicos del mundo: Gran Zimbabue
Un lugar sagrado, una ciudad antigua, un centro cultural, un lugar de fortaleza. Todo esto es el Gran Zimbabue. Está situado en África Oriental, justo al sur del desierto del Sahara. Para los cristianos, este patrimonio cultural tiene un significado bíblico. No se sabe con certeza quién intervino exactamente en la aparición de esta estructura, pero los científicos han descubierto su conexión con el rey Salomón. Sorprendentemente, en este territorio de África se construyeron otras ciudades, pero la Gran Zimbabue siempre ha destacado y la composición de los materiales de construcción era muy diferente de otras estructuras encontradas. Las «casas de piedra» -como se traduce la palabra africana «Zimbabwe»- tienen raíces persas, árabes y africanas. En las estructuras se han encontrado estatuillas de significado religioso. Los estudiosos también confirman la riqueza y religiosidad de la ciudad en el pasado. Las vistas de la ciudad han inspirado a más de un escritor para crear obras maravillosas. Entre ellos se encuentra el escritor de fantasía moderna George Martin con su serie de libros «Canción de Hielo y Fuego», que describió la antigua y rica ciudad de Qarth, situada en el desierto. Aunque la ciudad es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, se está desmoronando lentamente. No se necesita ninguna preparación especial para visitarla. Sin embargo, quienes visitan la ciudad al atardecer o por la noche se han quejado de fuertes dolores de cabeza y pesadillas. Esto puede deberse a las fuertes tormentas de energía que se intensifican aquí tras la puesta de sol.
Lugares místicos del mundo: Isla de Pascua
Del caluroso África nos dirigimos a un lugar más fresco y húmedo. Nos interesa el océano Pacífico, concretamente la isla de Pascua. Fue descubierta en 1578 por el capitán Juan Fernández, que por razones desconocidas mantuvo en secreto el descubrimiento de la isla y murió tiempo después. Entonces Te Pito o te Henua (es decir, nuestra isla) no fue descubierta hasta 144 años después, en 1772. La isla desierta, que parecía reunir todas las condiciones para una vida paradisíaca, resultó no tener nada de interés. Salvo las gigantescas esculturas de piedra, que los lugareños llaman «Moai». Más de 700 esculturas en distintos grados de preparación estaban esparcidas por la zona, lo que daba la impresión de que los maestros temían algo y se apresuraron a abandonar la ciudad sin terminar su trabajo. Aún se desconoce quiénes eran exactamente los moai para los isleños. Testigos presenciales de la época conservaron en sus notas datos sobre algún misterioso ritual ante las estatuas. Los nativos se sentaban cerca de sus ídolos y hacían una hoguera ritual con una danza parecida a un balanceo. Sigue siendo un misterio cómo las pesadas figuras (pesaban hasta 5 toneladas y medían entre 5 y 12 metros de altura) acababan sobre pedestales. No se encontraron ruedas, rodillos ni cuerdas gruesas en la isla. Por desgracia, casi todas las figuras se estropearon de un modo u otro y tuvieron que ser restauradas. También se quemaron algunos de los manuscritos en los que, según creen los científicos, estaba escrito el propósito de las esculturas de piedra. La Isla de Pascua aún guarda muchos secretos y misterios. Quizá sea usted quien descubra