Hazte amigo de la Luna

La Luna, el cuerpo celeste más cercano a nosotros, influye en todos los seres vivos y no vivos de la Tierra. La manifestación más llamativa y conocida de esta influencia son las mareas. Si recordamos que los seres humanos somos un 80% agua, podemos suponer el grado de influencia al que estamos sometidos por parte de nuestro vecino cósmico más cercano. En realidad, el espectro de influencia de un satélite natural es mucho más amplio y no se limita únicamente a la gravedad.

El ciclo de la Luna, que consta de 4 fases, es de 29,5 días. Durante este tiempo, la Luna vuelve a la misma posición del espacio con respecto al Sol. Cada día lunar tiene sus propias peculiaridades e influye en el ritmo de la vida, brinda ciertas oportunidades y crea diversos peligros. El primer día lunar se considera desde el comienzo mismo de la aparición del joven mes en el cielo. Este acontecimiento en el calendario habitual se refleja con un círculo negro. A continuación, el mes comienza a crecer cada día y en unos quince días se convierte en Luna llena. Tal posición se marca en el calendario con un círculo blanco. A continuación, el mes empieza a menguar y todo vuelve «a lo de siempre».

I trimestre. La mañana del mes es «Artemisa». Es el momento de los planes tácticos: se trata de concebir cosas nuevas, decidir y lanzar nuevos procesos, asuntos, relaciones en la vida (para un mes más adelante). El comienzo del ciclo lunar (1-7 días lunares), en este momento recibimos toda la energía e información necesarias para aquellos casos que están en nuestros planes. «Lo que concibas en este momento, lo obtendrás al final del ciclo lunar». No se recomienda pensar en cosas malas durante este periodo para no atraer la negatividad.

II trimestre. El día del mes es un momento de acción: «Themis». Tiempo para lanzar el fortalecimiento y la aceleración de cualquier proceso. La tarea es actuar sobre los planes previamente planificados, acercar los resultados tácticos, fortalecer la propia posición, desarrollar las relaciones, fortalecer la salud. El segundo trimestre lunar (8-15 días lunares), en este momento tenemos suficiente fuerza y voluntad para trabajar, actuar e invertir físicamente en la ejecución de los planes. En este momento debemos empezar a gastar la energía recibida para la realización de lo concebido. Continúa el reclutamiento de energía. Aquí hay dos peligros: esforzarse demasiado poco, esforzarse poco y esforzarse demasiado.

III trimestre. La noche del mes es «Diana». Tiempo de dar energía para obtener y evaluar resultados (principalmente en forma de actividad física), cambio y transformación de cualquier proceso, tanto interno como externo, incluidos los cambios de información sobre uno mismo en el inconsciente colectivo. El tercer trimestre lunar (15-22 días lunares), un tiempo para corregir, cambiar, ajustar y terminar. Aquí surgen oportunidades para ver tus errores y obtener los resultados concebidos en el primer trimestre. En esta fase gastamos la energía acumulada durante el crecimiento de la Luna, y es bueno que no la gastemos en ofensas, sino en resolver los problemas a los que nos enfrentamos.

IV trimestre. Noche del mes — «Perséfone». Momento de corregir los errores cometidos durante el último mes: la tarea consiste en determinar las causas de los fallos y eliminarlas. El cuarto trimestre (23-30 días lunares), un momento de reevaluación de los valores y el análisis de sus propias acciones o inacciones. Esta fase es buena para cambiar su actitud hacia sí mismo, lo que está sucediendo, deshacerse de todas las cosas innecesarias que le impiden vivir feliz. Para la luna nueva toda la energía e información acumulada debe estar agotada, esta fase debe abordarse «a cero».

Además, cada día lunar tiene sus propias peculiaridades, pero este es un tema para una conversación aparte.

La segunda cara del calendario lunar es el paso de la Luna por los diferentes signos del Zodíaco. Encontrar a nuestro compañero en uno u otro signo, en primer lugar, afecta al estado emocional, despierta ciertos deseos y crea un estado de ánimo. Además, cada signo del Zodíaco contribuye a la solución de ciertas tareas, que se resuelven más fácilmente en el momento en que la Luna se encuentra en este punto del firmamento.

La Luna en Aries favorece la realización de todo lo relacionado con la supervivencia y ayuda a potenciar al máximo las cualidades inherentes a cada persona, a controlar la materia, a cambiar tu cuerpo físico. Intenta utilizar las pistas de los ritmos cósmicos en tu vida. Quizás te ayuden a cometer menos errores y a ser más sabio en tus acciones.

La Luna en Tauro favorece las cuestiones financieras, ayuda a aumentar tu prosperidad, a encontrar fuentes de recursos (energéticos, físicos, financieros) y a formar tu capital, a aumentar la confianza y la estabilidad.

Luna en Géminis ayuda a hacer amigos, obtener una valoración positiva del entorno, ocupar un determinado lugar en el equipo, percibir adecuadamente todo lo relacionado con la «libertad de…», el crecimiento espiritual, la unificación de las personas. El momento es bueno para recibir e intercambiar información, así como para realizar viajes cortos.

Luna en Cáncer ayuda a vivir felizmente, a establecer contacto con hijos y parientes, a acumular herencia material y espiritual, a fortalecer la intuición, la comprensión de las reacciones inconscientes de las personas. El día promete éxito a quienes estén relacionados con negocios de restauración, jardinería y comercio de flores.

La Luna en Leo le ayuda a expresarse, a revelar su potencial y su pensamiento creativo, a obtener poder personal, libertad, fama, amor, calor, reconocimiento en la sociedad. El tiempo es propicio para joyerías, teatros, palacios.

La Luna en Virgo ayuda a obtener recompensas merecidas en su encarnación material, un cierto estatus, a corregir y ajustar todos los procesos de la vida y del cuerpo, patrocina hospitales y contables.

La Luna en Libra ayuda a encontrar parejas armoniosas, a ser capaz de cumplir los requisitos de la sociedad, a crear una imagen eficaz, promete éxito en asuntos elitistas y establecimientos de élite.

Luna en Escorpio ayuda a encontrar tu camino, tus principios, a ser eficazmente responsable de ti mismo y de los demás, a convertirte en adulto, asumir responsabilidades y librarte de las consecuencias del estrés. El momento es favorable para la inspección fiscal, la policía, para la investigación en profundidad, la asociación con otras personas, las empresas.

La Luna en Sagitario ayuda a convertirse en «su propio hombre», a encontrar su equipo, a integrarse en él, a sentir eficazmente la estructura de las relaciones sociales. Favorece los estudios, los viajes y los asuntos eclesiásticos.

La Luna en Capricornio ayuda a mejorar el estatus social y las relaciones con las personas mayores, permite alcanzar el éxito material, elegir eficazmente una profesión/negocio.

La Luna en Acuario ayuda a ampliar su presencia en el mundo, a conseguir «qué dejar como legado», a transmitir conocimientos. El momento es favorable para clubes, organizaciones benéficas, centros de investigación, comunicación amistosa, descubrir cosas nuevas.

La Luna en Piscis te ayuda a darte cuenta de tus habilidades y deseos, a encontrar recursos internos y externos para comprender y manifestar tus capacidades. El momento es bueno para todo lo relacionado con la soledad, la relajación, la inspiración. Favorable para todas las actividades relacionadas con el agua.